El proyecto debe resolver la nueva fachada por el depósito de Örebro.
Se construye el discurso a partir de la relación inmediata con su entorno natural y sus características meteorológicas, claramente vinculadas al agua en sus diferentes formas (sólida, líquida, gaseosa).
La propuesta desarrolla una fachada activa, cambiante y sensible a las condiciones meteorológicas del entorno, capaz de reaccionar mediante procesos fisiológicos similares a los de los seres vivos.
Cuando llueva, la fachada «se llueve». Cuando condense, la fachada «nubla». Cuando nieve, la fachada «se nieva». Cuando hiele, la fachada «se hiela». Cuando baja la temperatura, el edificio se calienta. Cuando sube la temperatura, el edificio se enfría.
Para ello, la tecnología de base, lejos de configurar mediante elementos sofisticados, busca en la tradición los mecanismos universales de recogida de agua: canalones y gárgolas y almacenamiento: depósitos. Es mediante la sistematización de estos elementos como se construye el lenguaje de la fachada. En pocas palabras, un dispositivo de canalones, gárgolas y cadenas (como un erizo mecánico de recogida y canalización del agua atmosférica).
Pero no se trata tan sólo de un lenguaje, sino de un sistema que crea un ciclo completo de recogida y canalización que se utiliza para conseguir el aislamiento térmico necesario aprovechando las capacidades físicas y térmicas del agua. En resumen, proponemos una arquitectura que trascienda lo físico y se instaure en el fisiológico: el descubrimiento de la expresión atmosférica de la arquitectura, del proceso sobre el objeto.
Ya no se trata sólo de cómo se ve, sino lo que hace.
- AÑO: 2016
- TÍTULO: Canalamaleon
- DESCRICPIÓN: Envolvente para depósito de agua
- LUGAR: Örebro, Suecia
- AUTORES: Sergi Serrat, Estel Ortega, arquitectos
- COLABORADORES: Júlia Nabona, arquitecta
- ENERGIA: Wattia Innova + AiguaSol
- IMÁGENES: Playtime